Hoy en día, cada vez es más necesario incorporar sistemas de localización robustos que permitan aumentar las condiciones de trabajo, seguridad y calidad de vida de las personas en determinadas circunstancias.
Son muchas las posibilidades de localización en el exterior gracias a los sistemas de posicionamiento por satélite (GPS). En cambio, estas tecnologías presentan grandes limitaciones de localización en entornos cerrados como edificios, túneles o zonas urbanas densas, donde la señal es debilitada, imprecisa e inservible.
En la investigación por dar solución al problema de la localización de interiores han surgido diversos sistemas cuyo fundamento es emplear señales (RF, ultrasonidos, infrarrojos) y nodos de referencia para estimar la posición en el interior. Sin embargo, la necesidad de todos ellos de apoyarse en una infraestructura conlleva un alto coste de despliegue que impide su aplicación y uso generalizado en el mercado.
Ante la necesidad de reducir el coste económico de estos sistemas, Luce ha desarrollado, bajo la dirección de Javier Durán de Jesus, CEO en Luce IT, un sistema de localización en interiores autónomo basado en sistemas inerciales que elimina la dependencia de la infraestructura. Las medidas de aceleración y orientación son aportadas por un conjunto sensores inerciales colocados en un agente móvil. Gracias a la tecnología MEMS (Micro-Electro-MechanicalSystems) es posible integrar los sensores en un único sistema denominado unidad de medida inercial (IMU). Esto permite conseguir un dispositivo de pequeño tamaño y de fácil colocación en el agente móvil.
El terminal móvil se comunica con la IMU a través de un cable micro-USB y envía la información, a través de Internet, a una plataforma de monitorización y gestión. Para aumentar la precisión y garantizar la continuidad de la localización del agente móvil, Luce ha optado por fusionar el sistema inercial con las señales que llegan al agente móvil a través de los sistemas GPS y puntos de acceso WiFi del edificio.
El sistema desarrollado por Luce utiliza un algoritmo propio y modulable que reporta información precisa y continua sobre la posición y orientación de la persona de forma transparente al usuario.
Entre sus principales ventajas se encuentran su autonomía y rapidez en el despliegue sin depender de una infraestructura previamente instalada, su respuesta en tiempo real y su posibilidad de ser embebido en otras soluciones.
La aplicación del sistema es clara para la localización del personal médico o enfermos de alzheimer en hospitales y residencias geriátricas, seguimiento de víctimas de violencia de género o de reclusos en centros penitenciarios, control del personal de infraestructuras críticas, monitorización de personas en entornos de trabajo peligrosos (incendios, intervenciones policiales y militares), etc. De esta forma, Luce contribuye a reducir riesgos y accidentes, mejorar la seguridad y el control de las personas en entornos donde los sistemas de posicionamiento satelitales no son accesibles.
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