Cinco dolores clásicos de los sistemas legacy
Acelera la Eficiencia Operacional en tu Empresa
En muchas organizaciones, el ecosistema de aplicaciones crece durante años como un rompecabezas mal ensamblado: soluciones puntuales, tecnologías dispares, sistemas que nunca fueron pensados para trabajar en conjunto. El resultado es un panorama complejo, costoso y poco ágil. Estos son los dolores clásicos que surgen… y cómo la Operational Grid Layer (OGL) el asset de Luce puede ser la solución estratégica que los alivia.
A continuación, desglosamos cinco de los retos más recurrentes en la gestión de datos que pueden estar impidiendo que tu negocio alcance su máximo potencial operacional:
- La Abundancia y Gestión de Datos Históricos
Uno de los retos más comunes es la vasta cantidad de datos y tablas acumuladas con el tiempo. A menudo, las organizaciones se encuentran con la incertidumbre sobre qué información retener o eliminar, especialmente cuando se trata de datos muy antiguos. Esta situación no sólo consume recursos de almacenamiento, sino que también complica la estrategia de fuentes, la historificación, el diseño de ingestas de datos y la gestión de la profundidad histórica necesaria para el negocio.
Solución:
La OGL permite definir una estrategia clara de ingestión y almacenamiento, distinguiendo entre datos operativos esenciales y aquellos que solo deben almacenarse para fines analíticos o históricos.
Gracias a su arquitectura modular y sus capas diferenciadas (RAW, Normalizada, Analítica), es posible controlar la profundidad histórica de manera eficiente, priorizando el valor del dato frente a su antigüedad o volumen.
- La Duplicidad e Inconsistencia de Datos entre Sistemas
Otro punto de dolor crucial es la existencia de datos duplicados entre distintos sistemas. Este problema es recurrente y conduce a múltiples inconvenientes: no sólo genera sobrecostes y complejidades en el mantenimiento de la infraestructura, sino que también introduce inconsistencias que pueden afectar severamente la fiabilidad y calidad de la información. El objetivo primordial es tener los datos lo menos duplicados posibles entre sistemas para evitar estos problemas.
La integración 1 a 1 entre sistemas provoca duplicidades de datos, inconsistencias y un mantenimiento casi insostenible. Por ejemplo, un simple catálogo de productos puede existir en cinco versiones distintas, con diferencias sutiles pero críticas.
Solución:
Centralizar el acceso a la información con una lógica única, normalizando los datos y evita duplicaciones. Así, los sistemas ya no tienen que sincronizarse entre sí, sino que consultan un único punto de verdad.
- Una mala experiencia de usuario que te cuesta clientes
Cuando los sistemas de cara al usuario —como sitios web, apps móviles o herramientas de autoservicio— dependen directamente de los sistemas operacionales para obtener datos, la experiencia suele verse comprometida. Las consultas lentas, los tiempos de carga elevados y las múltiples pantallas para completar una tarea generan frustración, abandono y pérdida de conversión.
Solución:
Al introducir una capa intermedia que desacopla la experiencia de usuario de la transacción operacional. Recupera los datos necesarios, los normaliza, los enriquece y los disponibiliza de forma rápida y eficiente. De esta forma, el 95% de las peticiones de información no necesitan tocar el sistema base, lo que permite mostrar datos en tiempo real sin sacrificar la velocidad ni la calidad de la experiencia. Esto es clave para entornos como ecommerce, postventa o atención al cliente.
- Los operacionales colapsan por exceso de carga
A medida que crece el número de consumidores de datos (front-ends, apps, APIs, integraciones), también lo hace el volumen de peticiones contra los sistemas operacionales. Esta sobrecarga puede hacer que los tiempos de respuesta aumenten drásticamente, que se degraden los procesos críticos del negocio o incluso que se generen fallos en cadena.
Solución:
Con la Operational Grid Layer, los sistemas no acceden directamente al core operacional, sino que lo hacen a través de una capa desacoplada y optimizada. La información se puede cachear, precargar y gestionar con lógica específica para reducir al mínimo el número de consultas directas al núcleo.
Además, los datos se pueden consumir en modo batch o en tiempo real según necesidad, garantizando la estabilidad del sistema base y permitiendo una escalabilidad sostenible.
- Tecnologías obsoletas, silos y falta de visión global
Las organizaciones que han crecido integrando soluciones específicas a lo largo del tiempo suelen acabar con un ecosistema fragmentado: distintos lenguajes, bases de datos, proveedores y lógicas de negocio.
Esta diversidad no sólo ralentiza la innovación, sino que dificulta tener una visión clara, compartida y accionable del negocio. Además, tecnologías obsoletas o no interoperables generan dependencia (lock-in) y elevan los costes de mantenimiento.
Solución:
Unifica el acceso y la lógica de los datos bajo una arquitectura común, permitiendo operar sobre una única capa tecnológica elegida, independientemente de las particularidades de cada sistema legacy. Con una lógica única y un lenguaje común (catálogo, diccionario, APIs normalizadas), se eliminan los silos, se reduce la dependencia tecnológica y se mejora drásticamente la capacidad de análisis y toma de decisiones. OGL permite moverse con agilidad en entornos híbridos y multitecnología sin quedar anclado al pasado.
En un entorno donde los sistemas legacy, la heterogeneidad tecnológica y la presión por ofrecer experiencias digitales sobresalientes conviven a diario, la Operational Grid Layer se posiciona como una solución clave para transformar el caos en orden. No se trata solo de tecnología, sino de estrategia: desacoplar, normalizar, optimizar y escalar de forma sostenible.
El valor de esta capa intermedia no está solo en lo que conecta, sino en todo lo que permite: decisiones más informadas, desarrollos más ágiles, datos más fiables y usuarios más satisfechos. En definitiva, una forma moderna de abordar los retos de siempre.
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